Entre los días 27 y 28 de enero ha tenido lugar en La Paz el taller “Escuelas Taller sostenibles-Escuelas Taller productivas” organizado por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo y la Corporación Andina de Fomento.
El objetivo de estos dos días de trabajo ha sido analizar y avanzar en propuestas de sostenibilidad para las Escuelas Taller a través de la puesta en marcha de iniciativas productivas y de oferta de servicios.
Al Taller han asistido los directores y responsables de coordinación académica de las Escuelas Taller de La Paz, Sucre y la Chiquitania, al igual que personal de la CAF de Bolivia, del Centro Cultural de España en Bolivia y del Programa de Patrimonio para el Desarrollo de la AECID en Bolivia.
El encuentro ha contado con el apoyo del Viceministerio de Educación Alternativa de Bolivia a través de sus responsables de educación técnica y de planificación, del Ministerio de Cultura de Colombia a través de su Director de Patrimonio Cultura y la responsable del Programa Nacional de Escuelas Taller, de la Escuela Taller de Bogotá, de la sede central de la CAF en Venezuela a través de su ejecutivo principal de desarrollo social y de la sede central de la AECID en Madrid a través del Responsable del programa Escuelas Taller.
Las jornadas han sido muy ricas en discusión y exposición de la situación actual de las Escuelas Taller que se encuentran en un proceso de fortalecimiento a nivel académico, institucional y técnico.
Este taller se enmarca en el proceso de consolidación y transferencia de las Escuelas Taller que ha conseguido en los últimos años importantes avances, como el reconocimiento de la titilación por parte del Ministerio de Educación de Bolivia y el avance en la integración del modelo Escuela Taller dentro del subsistema de educación alternativa como una herramienta que responde eficazmente a los objetivos del nuevo modelo de desarrollo y de educación del país. Se ha avanzado igualmente en una mejor integración de las Escuelas dentro de las instituciones locales, permitiendo así acompañar de una más de forma más eficaz los procesos de planificación estratégica.
Sin embargo son todavía importantes los retos para afianzar este proceso que se inserta dentro de las políticas educativas y culturales del país.
Entre las conclusiones del taller se encuentran la necesidad de mejorar los mecanismos de seguimiento del alumnado para poder mejorar su inserción al mercado laboral, el fortalecimiento de la red Escuelas Taller en Bolivia como una posibilidad de creación del Programa Nacional de Escuelas Taller, una mayor integración a la Red de Escuelas Taller de América Latina y el Caribe, una mejor gestión del conocimiento y la necesidad de adecuar la configuración de las Escuelas a los nuevos retos actuales.
El Programa Escuelas Taller nació en Bolivia apoyado por la AECID en el año 1992, siguiendo un modelo similar al desarrollado en España, con la apertura de la Escuela Taller de Potosí y con el objetivo común a todas las Escuelas de favorecer la inserción social y laboral de jóvenes en riesgo de exclusión a través de la formación en oficios vinculados a la recuperación del patrimonio cultural. Este programa supone una herramienta importante al servicio de la comunidad ya que bajo el lema”Aprender trabajando”, las Escuelas integran en su formación la rehabilitación de los principales monumentos con el adecuado seguimiento técnico, fortaleciendo así las políticas culturales municipales y departamentales.
En la actualidad funcionan en Bolivia tres Escuelas Taller en Sucre, La Paz y la Chiquitania que han contribuido a la formación de 900 mujeres y hombres en diversos oficios vinculados al patrimonio material e inmaterial y se han restaurado los principales monumentos de esas ciudades y sitios, reforzando la oferta turística y la identidad cultural.
Con el importante apoyo de los Gobiernos Municipales, Gobiernos Departamentales y otras instituciones participantes como la CAF y la AECID, las Escuelas Taller desarrollan una acción muy importante para la preservación del patrimonio cultural del país, la inserción social de los jóvenes, la recuperación, todo ello dando una respuesta clara a las nuevas orientaciones del estado Plurinacional de Bolivia y de su actual Plan Nacional de Desarrollo y agenda 20-25.